10 series coreanas más allá de El juego del calamar

Después del éxito de El juego del calamar en Netflix, el interés por las series de Corea del sur en Latinoamérica reaviva. Esta es una selección de algunos de los K-dramas más interesantes de años recientes.

n años recientes la industria del entretenimiento surcoreano ha crecido vertiginosamente. Aunado al éxito comercial del fenómeno del K-pop, la viralidad obtenida hace algún tiempo por Psy y su “Gangnam Style” y la importancia en la industria fílmica de nombres como Bong Joon-ho (Parasite) o Park Chan-Wook (autor de la trilogía de la venganza encabezada por Old Boy), el país asiático sobresale también en el mercado de las series de televisión. Este proceso parte de un estudio largo por parte de los creadores surcoreanos de las formas y fórmulas de la televisión anglo, llevando al máximo su objeto de estudio y perfeccionando cada detalle con precisión milimétrica. Hoy los seriales surcoreanos compiten en popularidad con el animé japonés y los dramas en inglés que antes gobernaban nuestro horizonte de consumo.

Desde mediados de septiembre el interés hacia las series televisivas surcoreanas ha reanimado una conversación que hace mucho tiempo dejó de ser parte de una cultura de nicho para convertirse en una industria rentable que compite con las realizaciones de los Estados Unidos e Inglaterra. El éxito de El juego del calamar, la sangrienta aventura visual de Hwang Dong-hyuk, ha marcado un hito para el entretenimiento surcoreano, convirtiéndose en la serie original más popular de Netflix, superando fenómenos de esta misma plataforma como Stranger Things, Dark o La casa de papel (lo sentimos, profesor). Sin embargo, hay mucho más por descubrir. Nos tomamos la tarea de buscar un contenido diverso para que continúen sumergiéndose en esta aventura seriada.

Kingdom (2019)

Desde que Netflix abrió su servicio a Corea del sur en 2016, el gigante del streaming ha presentado más de 80 películas y series coreanas, más de las que alguna vez pudo imaginar cuando tomó la decisión de impactar este mercado. Kingdom fue el primer experimento del servicio de los Estados Unidos que decidió inaugurarse con una serie corta de aventuras difícil de catalogar. Este drama histórico muestra el viaje del príncipe heredero Chang, durante la era de la dinastía Joseon (1392-1897), mientras intenta desenmarañar los misterios detrás de una epidemia zombi que se extiende por el reino de su padre. El drama político se entreteje con elementos sobrenaturales influenciados por la corriente de George A. Romero y presenta efectos visuales impactantes que sobrecogen por su atención al detalle. Es un viaje espeluznante en medio de la belleza de la zona rural coreana con extensas escenas de lucha con espadas, arcos y caballos. Así mismo, la serie tiene un episodio especial que estrenó este año, Kingdom: Ashin del Norte, que revela detalles inquietantes de la historia principal.

Pueden verla en: Netflix y Mubi.

Mudanzas al cielo (2021)

Inspirada en un ensayo de Kim Sae-byul sobre las limpiezas de escenarios traumáticos, esta conmovedora apuesta de Netflix cuenta la historia de un joven con Asperger y su tío exconvicto que se dedican a la limpieza forense. Después de que el padre de Han Geu-roo fallece, el joven se encuentra solo en un mundo rodeado de comportamientos que no comprende. Mientras tanto, su tío Jo Sang-goo, ahora su tutor legal, quien se ganaba la vida como luchador en combates clandestinos antes de que un incidente involucrado con su particular línea de trabajo lo llevase tras las rejas, intenta recomponer su vida. Este excéntrico dúo asumirá el control de la compañía Move to Heaven, en la que Han Geu-roo trabajaba con su padre, dedicada a la limpieza de espacios traumáticos. Conforme ordenan las pertenencias que dejan atrás los difuntos, ambos empiezan a descubrir las historias secretas de los que se fueron. Así, nuestros protagonistas crecen en medio de los extraños aprendizajes que les dejan en objetos mudos quienes ya no habitan este plano.

Pueden verla en: Netflix.

Rugal (2020)

Rugal cuenta la historia de Kang Gi-beom, un oficial de policía de élite que intenta destruir a una de las organizaciones criminales más grandes de Corea del Sur, Argos. En represalia por su labor, la esposa de Kang es asesinada por sicarios enviados por el grupo criminal y Kang pierde sus ojos, a la par de que recibe la culpa del asesinato. Más tarde, Kang es reclutado por el NIS para unirse a un grupo de trabajo especial conocido como "Rugal", cuyos miembros están equipados con biotecnología, lo que les otorga habilidades sobrehumanas. Después de recibir dos ojos artificiales para recuperar y mejorar su vista, Kang se pone en camino para limpiar su nombre y llevar ante la justicia a los responsables de la muerte de su esposa. Escenas alucinantes de combate se suman a la estética biopunk de una serie que no tiene reparo alguno en regodearse en lo más siniestro del mundo del crimen. Es como Robocop, pero sin el símil con Jesucristo y con más, mucha más, sangre y explosiones.

Pueden verla en: Netflix.

Mi nombre (2021)

Este drama gira en torno a Ji-Woo, una joven que busca venganza por la muerte de su padre, un traficante de drogas que fue asesinado por un asaltante desconocido en la puerta de su casa, mientras ella observaba todo tras la puerta. En el funeral de su padre Ji-Woo conoce al capo que dirige la organización Dongcheon, Choi Mu-jin, quien le dice que Dong-hoon era su amigo y hermano de mayor confianza. Además, le enseña el camino de la venganza y la ayuda a ser parte del cuerpo de policía local, pues es allí en donde encontrará al culpable de su rencor. Mi nombre es una de las más recientes apuestas de Netflix y estrenó apenas un mes después de El juego del calamar, por lo que no logró la popularidad que merecía. Sin embargo, es una historia emocionante que mantiene al espectador en vilo conforme nuestra protagonista va descubriendo qué sucedió realmente con la muerte de su padre. Este juego de dobles agentes es una reflexión sobre el mundo del crimen y una mirada emocionante en torno a lo que sucede a sus oscuros manejos. Después de verla, reconsiderarán quién es el verdadero enemigo.

Pueden verla en: Netflix.

Folklore (2018)

Esta antología de terror original de HBO Asia presenta supersticiones y mitos profundamente arraigados en seis países asiáticos: Indonesia, Japón, Corea, Malasia, Singapur y Tailandia. Técnicamente el mérito es solo en una sexta parte coreano, pero la serie les permitirá a los espectadores entrar en el mundo de los espíritus de un continente misterioso del que apenas y conocemos parte de sus leyendas en Japón. Así, con Folklore la audiencia occidental puede aproximarse a los relatos más oscuros que explican las fobias y supersticiones de varios países asiáticos, observando a través de la mirada particular de varios directores cómo se puede expresar este terror desde nuestro mundo híper conectado contemporáneo. Es una apuesta arriesgada por mantener viva la tradición oral de varias naciones y una oportunidad inquietante para adentrarnos en la lógica particular de cada una de sus idiosincrasias.

Pueden verla en: HBO Max.

Extraños del infierno (2019)

En 1944 Jean Paul Sartre publicó A puerta cerrada, obra de teatro de la que se desprende su máxima más famosa, “el infierno son los otros”. Sobre esta reflexión se construye este thriller psicológico enmarcado en la vida de Yoon Jong Woo, un veinteañero que arriba a Seúl para trabajar en una gran compañía. Mientras busca un lugar para quedarse el joven se encuentra con Eden Studio, una residencia barata en la que decide quedarse debido a su falta de dinero, a pesar de que el lugar objetivamente es la definición de un cuchitril. Aunque no está emocionado por la calidad del lugar y sus residentes anormales, incluido su vecino de al lado Seo Moon Jo, nuestro protagonista no puede hacer mucho más hasta que ahorre suficiente dinero para mudarse a un lugar mejor, mientras su vida mejora. Conforme se adapta a su nueva vida en la capital, comienzan a ocurrir sucesos misteriosos en su residencia, lo que hace que Jong Woo comience a temer a los compañeros de su nuevo hábitat, una colección de excéntricos aterradora. Tampoco ayuda que el anterior inquilino de su pequeña habitación se haya suicidado poco antes de la llegada de Jong Woo a esta extraña residencia.