Trans, cis, queer y otros términos de género

Parecería que lo que nos hace hombres o mujeres son nuestros genitales.
Nacemos, nos miran ahí abajo e inmediatamente queda decidido nuestro futuro.

n el hospital, recién nacido: “Ah, mira… tiene pipí. Quiere decir que le va a gustar el color azul y que le van a gustar las mujeres”. Consideremos esto: yo me enteré de lo mío –y salí del clóset– a los veintiocho años. ¿Tienen un amigo hombre que esté entre los quince y treinta años? Pues mañana él… puede ser ella. ¿Y entonces? 

Es hora de sentarnos un segundo y pensar en la cantidad de problemas que se solucionarían si tan solo dejáramos que cada uno decida su género cuando pueda decidir de manera consciente. Y no solo en el tema de género, sino en lo que respecta a su profesión, su religión, su sexualidad, con quién quiere casarse (o si no quiere hacerlo), quiénes son sus amigos, si quiere ser vegetariano (o no).

Dicen que las etiquetas son odiosas, pero la misión no debería de ser el “quitarnos tanta etiqueta” y “aceptar que todos somos humanos”, sino, más bien, deberíamos de poder ponernos cuanta etiqueta queramos y que se nos otorgue el respeto por tan solo pedirlo. Hay mil etiquetas útiles de uso diario: abuelo, estudiante, colombiano. El problema no es tener etiquetas. Es que por elegir usarlas se nos discrimine. 

Con esto en mente, les comparto una lista que da luces sobre el significado de los términos que usamos quienes hemos elegido cambiar nuestro género.

Trans: Del latín de atravesar. Como “transporte” y “transatlántico”. Es un prefijo que habla de “más allá de”, “al otro lado de” o que denota cambio.

Trans-vesti

Si alguien atraviesa, traspasa o rompe las normas del vestir binarias que ha impuesto la sociedad desde siempre, es travesti.

Ojo: una mujer en pantalones es tan travesti como un hombre en falda, solo que está bien visto querer ser masculino y mal visto querer ser femenino. Piensen en este ejemplo: ¿Qué se dice de quien se quiere encargar de las cosas en casa o en el trabajo? Que “se puso los pantalones”. ¿Qué le dicen al último niño en llegar cuando todos salen corriendo en grupo? Que “corrió como una niña”. Ay, el lenguaje.

Trans-género

Si alguien atraviesa el género que se le asigna al nacer, pero mantiene tal cual sus genitales, es transgénero. Mejor dicho, son quienes escogen una identidad de género que no corresponde con su sexo biológico.

Esto no tiene nada que ver con que se vista como hombre o mujer o que se comporte como uno o el otro. Esto tiene que ver con si se siente hombre o mujer. Si esto significa que se quiere operar algo o tomar hormonas para tener facciones estereotípicas del rol de género, pues bien.

Pero ¿de cuándo acá nos importa que una mujer tenga senos o pelo largo para poderla aceptar como mujer? A EVA, la de Wall-E, la tratamos como mujer y no tiene ni cromosomas. Yo, por ejemplo, soy mujer con pene, mujer transgénero. Y a quien me diga “si tienes pene no puedes ser mujer”, solo le dejo esto para pensar: ¿acaso la mujer vale tan solo porque tiene vagina?

Y sí, esto quiere decir que hay muchos hombres con vagina por ahí. O mujeres con pene. También quiere decir que una pareja de hombre y mujer trans podría ser completamente heterosexual y tener hijos, solo que el que se embaraza es el papá.

Trans-sexual

Básicamente es una persona transgénero que también busca modificar sus genitales. Para que quede más claro: si los genitales importan en la mescolanza, esa persona es transexual. Se solía decir que se era transexual solo después de pasar por el quirófano o por una intervención hormonal, pero como son tratamientos tan caros, es discriminatorio pedir que alguien pague para que pueda escoger su identidad de género. Sin embargo, este término poco se usa hoy en día.

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Cisgénero: Del latín de alinear. Es un prefijo que se usa cuando se quiere hablar de algo “de este lado”.

Si vamos a usar etiquetas, que sea parejo. Quien no es trans, es cis. Mejor dicho, cisgénero es para quien coincide la identidad de género con la sexualidad biológica que se le asignó al nacer.

Nada de “eres trans o normal”. Ey, yo no soy anormal.O que “eres trans o biológica”. Yo no soy cíborg, también soy mujer biológica. Eres trans, o eres cis, no puedes hablar de uno sin hablar del otro. 

Género no-binario/genderqueer

¿Quién dijo que tenemos que casarnos con un género de por vida? Si la tecnología me permite ser hombre hoy y diez años después ser mujer, y luego diez años después volver a ser hombre, ¿por qué no? Igual así cambiamos nacionalidades y culturas. De hecho, hay quienes viven estrictamente evitando entrar al binario. No son ni hombre ni mujer. O son hombre y mujer a la vez.

Y que quede claro: que alguien cambie su cuerpo no significa que mágicamente cambian sus preferencias. Si la misión fuera el salir con hombres… pues para eso no es necesario ser mujer.

A la hora de hablar de preferencias sexuales, también hay varias cosas que debemos tener en cuenta:

Homosexual

Es quien se siente atraído romántica o sexualmente por personas que comparten la misma identidad sexual o de género. Vale la pena aclarar que todas las especies del reino animal han demostrado alguna forma de comportamiento homosexual, excepto aquellas donde no hay comportamiento sexual.

Y bueno, no crean que ser trans implica ser homosexual o viceversa. Yo, por ejemplo, antes de transicionar tuve novias y, luego de transicionar, también he tenido novias.

Nunca he entendido cuál es el supuesto miedo a la homosexualidad. “Que es que la gente deja de reproducirse y le haría daño a la sociedad”. ¿Dónde están las marchas en contra de las parejas heterosexuales que ya se casaron y nada que tienen hijos? 

¿Se puede tener hijos siendo homosexual? Claro que sí. Hay un sinfín de técnicas de reproducción que permiten que dos mujeres lesbianas tengan hijos. Y si todo falla, hay desafortunadamenteuna cantidad inmensa de niños a los que sus padres heterosexuales no quieren criar y dan a la adopción. ¿Por qué no se ha de permitir que los críe una pareja homosexual llena de amor?

Pansexual

¿No se la sabían, no? A pesar de ser el foco de todos los chistes acerca de que si es gente a la que le gustan las harinas, el pande pansexual viene de “totalidad”. 

Una persona pansexuales quien no se fija en la identidad de sexo o género específico de la persona con quien quiere salir. Puede ser hombre, o puede ser mujer, o puede ser una combinación de ambas. O puede ser ninguna. Básicamente son quienes dicen cosas como: “A mí no me importa qué o quién o cómo se presente, yo me dejo atraer y me enamoro de la gente por meramente ser humanos, sin restricciones”. Al pansexual no le importa eso en su pareja. Mi amor para la gente que piensa así. 

La pansexualidad se podría interpretar como bisexualidad, solo que hay gente que no quiere tener género definido. Mejor dicho, que lo quiere mezclar y ser hombre o mujer al tiempo –o no ser hombre ni mujer–, y pues eso ya no encaja en un marco binario. 

Asexual

Hay otros que no sienten atracción sexual alguna por los demás. ¿Y? ¿Acaso vinimos al planeta tan solo a reproducirnos o a tirar? De hecho, una persona asexual puede tener relaciones sexuales porque así es su cariño por sus parejas o su curiosidad por sentir cosas. Una arista de la asexualidad es la demisexualidad: gente que no siente atracción por alguien más sino hasta que encuentra un espacio cómodo y del buen compartir.

Heterosexual

La atracción romántica o sexual hacia personas de la identidad de sexo o de género binariamente opuesto al propio. Ojo, esto no es para nada el normal ni programación biológica. Y, pues, científicamente hablando, no se ha podido comprobar que la heterosexualidad sea algo genético.

Las banderas del orgullo

Las hemos visto en marcha y son los símbolos de nuestra unión como grupo político y social que busca comunicar que la diversidad existe.

Bandera arcoíris

Conocida entre amigos como “la bandera de la libertad”. Nació en California en 1978, pero es de uso mundial. El arcoíris viene para demostrar una salida del clóset: va del rojo detenido a los nuevos horizontes con el verde y azul, finalizando en el morado como el color del orgullo. Y, pues bueno, demuestra que así como hay una infinidad de colores en el arcoíris (¡todos!), también hay una infinidad de humanos. 

Bandera trans

Un tanto menos conocida que la bandera del arcoíris, pero no menos importante. La bandera del orgullo transgénero se lleva usando desde el año 2000. La banda azul representa el color estereotípico para los niños y el rosa para las niñas. La blanca en el centro es para quienes se encuentran en esa transición, aquellos que desean mantenerse neutrales entre un género y otro, y aquellos que mantienen ambos sexos. La bandera está pensada para que no importe el lado que se use al ondear, siempre será correcta. Esto nos simboliza a nosotres mismes, siendo correctos sin importar de qué ángulo se le mire el color.

Bandera del aliado LGBT

Esto no lo vamos a lograr sin apoyo de gente que no es parte del colectivo. La bandera representa el blanco y negro binario de la vida heterosexual sobrepuesto con la bandera de la libertad en forma de “A”, por “aliados”. Si esta es tu bandera, gracias de verdad por estar con nosotres en estos tiempos que a veces pueden ser tan complejos.

Lo importante es entender que habrá cosas en el rubro de la diversidad que no nos van a gustar. Pero hay que permitirlas. Ningún modo de vivir es mejor que otro y todos tenemos derecho a tener nuestras opiniones. Lo que sí es claro es que no tenemos derecho a quitarles libertades a los demás basándonos enteramente en dichas opiniones. Si alguien nació con la piel de color diferente al nuestro, ¿por qué le hemos de negar acceso a ciertos lugares? Pues lo mismo aplica cuando alguien se quiere poner falda o tacones.

Ophelia Pastrana:

Ophelia es, según Business Insider, la mujer #69 a nivel mundial con más influencia en Twitter en el tema de tecnología. Dos veces conferencista TEDx y cuatro veces conferencista Campus Party y Aldea Digital. Ha escrito columnas para varios medios internacionales, ha hecho stand-up, tiene varios proyectos en YouTube (como DiagnoCis) y es profesora de redes sociales como estrategia de negocios en Platzi y en el Tecnológico de Monterrey.

Twitter: @OphCourse