Emprendimientos bogotanos en cuarentena
Durante los próximos días resaltaremos la labor de algunos emprendedores de Bogotá, quienes con esfuerzo y dedicación siguen trabajando durante los tiempos de coronavirus.
os emprendedores son los albañiles que rellenan los vacíos que existen en una comunidad y quienes echan mano de la creatividad y la innovación para aportar soluciones a problemas reales, como el vuelco que ha causado en nuestras vidas el COVID-19.
Por fortuna, el país está lleno de empresarios y dueños de negocios que además de seguir operando en condiciones inesperadas, asumieron retos como trabajar por el beneficio de los demás. Sus esfuerzos son imperfectos pero titánicos, y en esa medida nada tiene más sentido que resaltar la creatividad con la que están enfrentando y evitando el virus. Así que seleccionamos algunos emprendimientos bogotanos (y otros de Medellín y el Valle de Aburrá) que están utilizando lo que tienen a la mano para seguir andando. La lista crecerá cada día, y esperamos que su apoyo hacia ellos también.
Mistral está ubicado en una calle pintoresca de Chapinero (Calle 57 # 04-09) y trae ese aire de la panadería tradicional francesa a Bogotá desde el 2016. Sus fundadores, Dylan Misrachi, Jérôme Di Salvio, Camila Vélez y Marion Lafosse buscaban crear un lugar diferente donde reunirse con los amigos o pasar la tarde en algún lugar del barrio que no fuera necesariamente un bar o restaurante.
La llegada del virus trajo una situación muy crítica para Mistral: la panadería pasó de atender todos los días de la semana a reducir su actividad a ventas por ventanilla y domicilios de productos artesanales como pan, sopas, carnes y postres a toda Bogotá por medio de su página web. “Nuestra primera motivación fue pensar en el pan como producto de primera necesidad, es importante permanecer abiertos por razones simples: evitar la escasez de alimentos y las aglomeraciones en los supermercados, pero también defender la posición de comercio de barrio frente a los industriales” afirma Marion.
El gran anfitrión de esta crisis es el mundo digital y la tecnología, y Mistral lo tiene claro, así que se reinventaron como #MistralEnCasa en sus cuentas de Facebook e Instagram ofreciendo a sus seguidores videos cortos de cómo preparar deliciosos platos. “Como estamos todo el día en casa, ya tenemos más tiempo para cocinar, así que adaptamos nuestros productos con las técnicas de la cocina al vacío y ultra-congelación, las cuales conservan la calidad, frescura y mantienen la comida libre de conservantes. Los pueden preparar fácilmente, según el pedido. Solo tienen que calentar al horno o en baño maría por unos minutos” comenta Marion.
Sentir el delicioso olor de un pan crujiente y recién salido del horno es una tradición con la que Mistral está comprometida. Incluso si eso implica llegar a la casa de sus clientes y utilizar sus hornos.
Ímpetu nació de la unión de Miguel Zamora, Brayan Romero y Christian Mantilla, tres jóvenes que han trabajado más de ocho años como asesores en entrenamiento físico y planes de alimentación. Ahora trabajan desde las redes sociales, donde han continuado las clases de entrenamiento personalizado con sus clientes, y ofrecen talleres en temas como alimentación saludable y entrenamientos gratuitos desde casa.
Debido a que el aislamiento puede ser una situación estresante para muchas personas, y que el cuidado personal y una buena rutina de ejercicios puede ayudar a mantener la salud física y mental, Miguel, Brayan y Cristian decidieron comenzar a fabricar barras multifuncionales, un accesorio que se puede fijar en cualquier pared y consta de una variedad de barras que permiten fortalecer, tonificar y trabajar varias zonas del cuerpo. “A la gente le ha gustado mucho el producto porque tiene diversos usos, ya que pueden hacer ejercicios para espalda, pecho, hombro, tríceps y abdomen con un mismo artículo” afirma Miguel. Ímpetu también ofrece productos como chalecos, pesas, sacos de boxeo, mancuernas y discos para complementar el ejercicio.
Si usted está interesado en mejorar su condición física con ayuda de Ímpetu, solo debe escribir a su cuenta de Instagram o al WhatsApp (+ 57 3024072311), escoger el producto que desea y en un día hábil estará llegando a su casa. Recuerde que el pago es a contraentrega, es decir, cuando la entrega llegue a su puerta.
Hambre Shop
Hace cinco años Alejandra Garavito y Sandra Silva decidieron luchar contra los prejuicios y la vergüenza que abarca el tema de la sexualidad en el país y crearon Hambre Shop, “un F♥ck Shop, una propuesta completamente diferente de una juguetería para adultos que lleva el sexo de la cama a la mesa y lo convierte en parte de todas nuestras conversaciones. Queremos acabar con la idea de tener que esconder nuestros sextoys y las primiparadas por falta de información a la hora de follar” comenta Alejandra. La marca también tiene un enfoque académico: imparten charlas y talleres de educación sexual, derechos sexuales y reproductivos para niños y adolescentes bajo su Fundación Sexo con Ropa.
Para acceder a los productos de Hambre solo debe ingresar a la tienda online, consultar su catálogo de juguetes, lubricantes, estimuladores, aceites y juegos para disfrutar la sexualidad en soledad o en pareja. Al quedar registrado el envío en la página, lo empacan en una bolsa de seguridad para que el producto esté bien sellado y nadie más que usted pueda ver el contenido.
La pandemia de coronavirus ha ayudado a su negocio, pues las personas están recurriendo a los sextoys como una herramienta para explorar su sexualidad. “Sandra y yo llevamos años tratando de explicarle a la gente que las parejas de paso no son responsables de nuestro placer; que debemos conocer nuestra anatomía genital, verla, quererla y tocarla con amor y no dejarle la tarea a los demás. Pero, tenía que venir una pandemia para decirlo mejor que nosotras. Entonces vemos cómo, de repente, se despierta la curiosidad por estos coloridos vibradores y masturbadores que vendemos” explica Alejandra.
En el año 2013, Juan Felipe Vélez hizo su propio diseño de una bicicleta fixie, una bicicleta de piñón fijo y sin punto muerto con la que se puede avanzar, frenar y dar marcha atrás utilizando únicamente los pedales. Su bicicleta recibió una buena acogida en el mercado: el diseño era llamativo, al igual que los colores que utilizaba. Así fue como se dio cuenta que tenía una idea de negocio entre manos y fundó la tienda Juan Bikes en Bogotá.
Juan tiene como objetivo fabricar bicicletas de acuerdo a la medida de los clientes (ancho de hombro, largo de brazos y estatura) pero además decidió concentrarse en los detalles. “Nuestra cereza del pastel es la personalización en cuanto a sus partes, accesorios y color de bicicletas que compran nuestros clientes” afirma Juan.
Debido a la coyuntura del aislamiento muchas de las personas que recurren a las bicicletas para practicar deporte no han podido salir a rodar. Debido a eso Juan emprendió la idea de fabricar rodillos, un accesorio que se puede asegurar a bicicletas con ruedas de cualquier tamaño y que permite rodar hasta el infinito y más allá sin salir de casa. “Sabíamos que era momento para generar este mercado, ya que la gente estaba aburrida y lo unico que querian era pedalear desde casa” cuenta Juan. Para adquirir este accesorio solo debe escribir a la cuenta de Juan Bikes en Instagram, escoger el rodillo según las pulgadas de su llanta trasera (26, 27.5 o 29) y en un plazo máximo de un día llegará a la puerta de su casa.
Alisson Cantor creó el colectivo Auge en Auge, un medio de difusión para nuevos artistas, eventos y emprendimientos con el objetivo de reunir y comunicar diariamente información de actividades, talleres y en general, “planes”, para aprender sobre maquillaje, repostería, dibujo, poesía, escritura y danza.
La información de los planes se difunde a través de publicaciones en las redes sociales de Auge en Auge, y desde que empezó el aislamiento, el foco está en recopilar información sobre eventos que vayan a ocurrir en línea. Entre los planes que ha destacado recientemente hay algunos organizados por CasaTinta, Blush-Bar, Arte Kaput, la Cinemateca de Bogotá y Balistikal, y la idea es apelar a todo tipo de público. “Los planes por lo general son para todos, no importa el género o la edad, pero si es cierto que el 68% de nuestros seguidores son mujeres. Nos hemos unido incluso en algunas ocasiones con colectivos feministas y apoyamos todo lo que tenga que ver con el tema”, afirma Alisson.
Con dos años de actividad en las redes sociales, muchas personas que buscan aprovechar su tiempo recurren a Auge para capacitarse, aprender algo nuevo o simplemente tener algo que hacer. Alisson siempre está en búsqueda de ideas innovadoras, nuevos talentos o festividades que puedan hacer parte de su plan semanal.
El proyecto La Trocha nació hace tres años en Quito, Ecuador, cuando Sandra Priori y Natalia Peris se unieron por una causa en común: “dignificar el trabajo de pequeños productores, ya sean campesinos o personas que quieran masificar sus recetas tradicionales” comenta Sandra.
Sandra y Natalia se mudaron a Bogotá debido a la gran cantidad de comida que entra a la ciudad día a día. Su emprendimiento comenzó a tomar fuerza en redes sociales debido a la crisis sanitaria y a las dificultades que esta impuso a pequeños productores que quisieran comercializar su mercancía. Hasta el momento, han podido ayudar a más de 80 productores de Cundinamarca y municipios cercanos, ofreciendo sus verduras, frutas, galletas de maíz, diferentes clases de pan, café, chocolate con fruta y germinados de semillas.
Además de los comestibles, La trocha también brinda clases no formales de autogestión y autocuidado en temas de salud como ginecología natural y elaboración de productos de aseo personal de forma orgánica:“para nosotras era importante ofrecerle a la gente diferentes propuestas de aprendizaje que tengan que ver con la tradición y el conocimiento que ofrece nuestra tierra”, afirma Sandra.
Uno de los pilares más importantes para el trabajo que La trocha es que sus clientes entiendan cómo es el proceso de cultivo y el trato que tiene la tierra en la que se encuentran sus alimentos, y que así puedan ir tomando conciencia del esfuerzo que implica el cuidado de la naturaleza, el comercio justo y la política de compra en la ciudad de Bogotá.
Para realizar sus compras basta con escribirles por Instagram, Facebook o WhatsApp (+57 3188660584) y revisar la lista de productos. Tenga en cuenta que la disponibilidad varía cada semana y que el envío toma un día hábil.
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