Pasar al contenido principal

 

Escribe más de 3 caracteres

¿Cómo es salir del clóset? Siete jóvenes cuentan su historia

¿Cómo es salir del clóset? Siete jóvenes cuentan su historia

Ilustración

Salir del clóset es una de las decisiones más desafiantes en la vida. La familia, los amigos y la aceptación propia confrontan a muchas personas ante ese paso. Estas historias revelan experiencias de quienes lo han vivido y aportan consejos de una profesional en salud mental.

separador

En 1980, se eliminó la homosexualidad como un delito del Código Penal colombiano; diez años después, fue retirada de la lista de enfermedades mentales de la OMS y desde hace ocho años se decretó que las personas trans podían cambiar su nombre y sexo en la cédula. Estos son algunos de los logros más destacados de la comunidad LGBTIQ+ en Colombia y en el mundo. Detrás hay años de movilizaciones, tutelas, denuncias, marchas y consignas de quienes decidieron ser personas libres y auténticas, promoviendo la visibilidad y garantizando el bienestar de la comunidad diversa en el país.

Para que estas luchas colectivas frente a una sociedad intolerante sean posibles, cada miembro de la comunidad tiene que atravesar primero un proceso propio de aceptación y reconocimiento. Cada movilización está conformada por miles de historias así. Salir del clóset es una experiencia individual, pero no solitaria, pues requiere el esfuerzo de muchos, como los círculos sociales, familiares y afectivos. Para tomar la decisión de dar ese paso son fundamentales los modelos de identificación. Conocer las historias de otres es un buen punto para empezar.

Ser parte de una disidencia sexual y aceptarlo es un proceso que no se da de un día para otro. Según la psicóloga y terapeuta sexual de Colsanitas Pilar Aguirre, “La mayoría de los papás no esperan tener un hijo homosexual o una hija lesbiana, y cuando sienten atracción hacia alguien de su mismo sexo muchas personas se deprimen, hay ansiedad, se sienten incomprendidos o lo niegan, mejor dicho, se les enreda la vida. Pero los procesos terapéuticos sirven para ayudarles a un reconocimiento y aceptación de esta característica, que ella o él puedan saber que es normal como cualquier otra característica personal. Puede que uno tenga el pelo rizado y no le guste, pero es la genética con la que nació, entonces puede alisarlo o aceptarlo”.

Si usted o alguien que conoce se encuentra descubriendo o aceptando que es parte de la comunidad LGBTIQ+, estas historias pueden ayudarle a conocer el panorama de personas que salieron de clóset en diferentes contextos pero con algo en común: la confianza y espontaneidad de ser elles.separador07 Harold Garcia

Valentina Restrepo
Mujer bisexual (ella)

Edad: 23 años
Origen: Palmira (Valle del Cauca)

Valentina es la definición de ser “un amor de persona”, es dulce y serena. Tiene el cabello liso a la altura de los hombros, es delgada y bajita. Estudia sociología en Medellín y trabaja en un centro de documentación.

Su historia parece una novela: nació en el seno de una familia católica en el Valle del Cauca y creció entre misas y rosarios. En este ambiente llegó a sentir que tenía vocación religiosa y comenzó su proceso de celibato y entrega para convertirse en monja. Viajó a Medellín a una comunidad religiosa y allí conoció a una hermana que sería el comienzo de todo: primero fue una noche de tensión, luego dos, hasta que terminaron besándose. Todo fue un escándalo y tuvieron que separarse, siguieron su relación a distancia pero con el tiempo, la dependencia emocional y la toxicidad fueron más fuertes, mucho más que los inconvenientes que tuvieron que atravesar para estar juntas.

Primero se lo contó a su madre y a sus hermanas,  quienes la apoyaron y acompañaron en su proceso. Durante la pandemia terminó con su pareja y estuvo reflexionando un año sobre quién era realmente y a principios de 2021 decidió contarle a su padre. “La reacción de mi papá no fue de desprecio, pero sí fue muy desconcertante ver su cara. Recuerdo que él me dijo ‘¿En qué momento? Usted no era así. ¿Qué fue lo que la hizo cambiar?’. Pero luego me dijo que yo ya era grande, que ya sabía qué estaba bien y qué estaba mal, que por eso no iba a dejar de ser su hija. Que si la muchacha iba a ir a la casa pues bueno, pero que por favor no tuviera ese tipo de actos en público y esas cosas”. 

Valentina es el claro ejemplo de que nada es seguro en nuestras vidas, que el amor no es un simple capricho y que lo que está oculto tarde o temprano sale a la luz. Ella afirma que lo más importante para tomar la decisión de salir del clóset fue estar segura de sí misma, apropiarse de su orientación y reconocerse. 

separador07 Harold Garcia

Jessica Malak Cera
Mujer trans bisexual (ella)
Edad: 23 años

Origen: Itagüí (Antioquia)

Jessica tiene un encanto inherente a su personalidad, su cabello rizado, abundante y rojo. Es una geek con un estilo gótico que le brinda un aura misteriosa. Es desarrolladora de software y actualmente está comprometida con su pareja.

Una tarea del colegio representó el inicio para Jessica. Estaba en su último año escolar y tenía 17 años cuando le encargaron diseñar un vestido con materiales reciclables para un desfile. Como ninguna de sus compañeras accedió a modelar el vestido, fue ella quien lo hizo. “No sé por qué algo en el interior me dijo ‘póngase ese vestido usted, no hay problema’. Entonces me aventé y en el momento en el que eso pasó salí frente a todo el colegio. Antes había tenido ese sentimiento de que había algo raro, que no me terminaba de cuadrar, pero en ese momento fui feliz”, recuerda.

Antes, cuando tenía 12 años, había salido del clóset como bisexual, por lo que desde entonces sus padres había comenzado a comprender la diversidad en las orientaciones sexuales. Su padre murió tres años antes de que Jessica decidiera empezar su transición, así que compartió este proceso con su madre. Aunque al principio fue difícil para ella, con el tiempo lo fue entendiendo y se hicieron más unidas, incluso comenzaron a compartir prendas. En sus círculos sociales no pusieron ningún reparo en apoyarla, de hecho “Jessica” fue el nombre con el que sus amistades la llamaron desde entonces. 

Al empezar su proceso de transición debió desaprender lo que según su crianza y la sociedad significaba ser trans. “Lo primero que se me vino a la mente fueron todos estos estereotipos que había tenido de que las trans solo eran trabajadoras sexuales o peluqueras, además de encasillarlas se les miraba de una manera muy denigrante. Era pesado para mí pensar en dejar de ser una estudiante destacada en el colegio y enfrentarme a la posibilidad de que como mujer trans mis únicas opciones podrían ser dedicarme a la peluquería o cosas así. Pero me puse a buscar referentes en internet y me di cuenta de que las mujeres trans estamos en todos lados pero no nos damos cuenta”. Sus referentes hoy son Ophelia Pastrana, una exitosa física y economista colombiana, y las hermanas Wachowski, cineastas estadounidenses conocidas por dirigir la saga Matrix.

separador07 Harold Garcia

Santiago Yepes
Queer no binario (él, ella, elles)
Edad: 21 años

Origen: El Retiro (Antioquia)

Santiago es carismático y amable, alto, de cabello rosa y ondulado, con un estilo muy kitsch no es alguien que pase desapercibido. Es estudiante de artes plásticas en Medellín pero ha vivido toda su vida en El Retiro, uno de los pueblos más tradicionales de Antioquia.

En su búsqueda de quién quería ser, comenzó aceptando que le gustaba un hombre de su colegio. Lo habló con su mejor amiga y tardo un año y medio en aceptar que era bisexual, que no quería estar ceñido a los cánones heteronormativos. Entonces, decidió dar el paso de cambiar esas dinámicas. “En mi contexto familiar siempre había presión sobre cómo debía ser, por ejemplo, mis papás y mis abuelos eran quienes me buscaban y compraban la ropa, nunca podía escoger, siempre era ‘tiene que llevar esto y tiene que vestir así y así’. Pero llegó este man, me gustó, me abrió el campo y vi que la perspectiva podía ser más amplia, que me estaba perdiendo un montón de cosas por culpa de mi familia”.

Nunca “salió” formalmente del clóset en una conversación con su familia, simplemente comenzó a llevar sus parejas a casa, a  cambiar sus prendas, a usar faldas, a ponerse accesorios y tinturarse el cabello, así fue como paulatinamente normalizó ante su familia quien quería ser. Su proceso de emancipación se fundamentó en la información que encontraba en internet ya que en su pueblo no encontró una orientación de alguien más sobre cómo y por qué se sentía diferente a los demás. 

Aunque acepta que las miradas juzgadoras y los comentarios hirientes son parte del proceso, vale la pena ser quién el cuerpo y el corazón gritan. 

Con una preocupación por los temas sociales y de género, no se pierde una sola oportunidad cuando de debatir se trata. Por esto, intenta continuamente crear maneras de visibilizar luchas de la comunidad LGBTIQ+ desde su creación artística. 

separador07 Harold Garcia

Andréi Gómez
Hombre trans (él)

Edad: 18 años
Origen: Bogotá

Andrei es imperturbable y de risa fácil. Tiene el cabello negro, utiliza lentes y tiene un gato. Su vida se balancea entre trabajar y estudiar artes plásticas en Bogotá.

Tenía 11 años cuando  comenzó a explorar estímulos sexuales y afectivos diferentes. De una familia conservadora, su orientación e identidad sexual no son temas que suelen tratarse, ya que para él siempre se torna en una conversación incómoda sin distintos puntos de vista, solo burlas. Es por esto que su búsqueda de aceptación ha estado delimitada a sí mismo y a su relación con su madre: han asistido a terapia familiar para crear un ambiente más ameno entre ambos. Primero, decidió salir del clóset como bisexual y a los 14 años comenzó su proceso de transición como hombre. 

Tener una orientación sexual diferente en el contexto colombiano es un escenario de resistencia. Muchos y muchas tardan años en aceptarlo y comunicarlo, pero Andréi decidió hacerlo siendo menor de edad, aunque reconoce que fue una pelea dura desde el primer momento. “Tuve que enfrentarme a muchos cambios dentro de la institución donde yo estudiaba, fue horrible porque era un colegio muy conservador donde casi todos mis derechos estaban siendo vulnerados por la rectora, por los coordinadores y por los profesores. Incluso hubo muchos casos en los que tuve que enfrentarme solo a mis compañeros que se burlaban de mí”.

Andréi buscó algún tipo de orientación profesional en su transición, pero lastimosamente recibió una atención sesgada que enfocó su terapia psicológica y psiquiátrica en conocer el “por qué” de su identidad sexual, en lugar de acompañarlo a entenderla y abrazarla. 

Hoy, Andréi continúa en su transición. Es pacifico, sí, pero radical en el momento de defender sus ideales.

separador07 Harold Garcia

Lorena Sanabria
Mujer lesbiana (ella)
Edad: 29 años

Origen: Gutiérrez (Cundinamarca)

Lorena es un alma libre y salvaje, no le teme a demostrar, a ser ella misma las 24 horas del día. Estudia artes plásticas en Medellín y es docente de dibujo, manualidades y pintura. Es una amante del cambio, cada semana tiene el cabello de un color diferente y una idea en camino.

Entre el frío de las montañas en las que se crió, Gutiérrez era un pueblo muy limitado y conservador para los sueños de Lorena, por esto decidió mudarse a Medellín hace ocho años. Era una muchacha que pasaba desapercibida, tímida y amable, comenzó a tener diferentes círculos sociales y espacios que le permitirían cimentar la vida que siempre soñó.

Lorena relata que desde niña sabía que le gustaban las mujeres cuando encontraba más atractivas a las actrices que a los actores en la televisión. “Me di cuenta de que me encantaban las chicas una vez jugando pico botella en un barrio que se llama La Milagrosa: le di un piquito a una nena y fue como ‘¡Ay, jueputa! ¿Qué es esto que estoy sintiendo?’, fue una sensación extraña pero muy bacana”.

Revelar su orientación sexual fue complejo, primero lo hizo con sus amistades de la ciudad, pero aún debía hablar con quienes más amaba: su hermana y sus sobrinos de Gutierrez. Aunque su hermana es religiosa apoyó la decisión de Lorena, ya que por el hecho de que le gustaran las mujeres no dejaría de ser su hermana. Compartir quién realmente era cambió positivamente su relación, ya que en el contexto en el cual crecieron el cariño no era un pilar, pero ahora la familia que querían crear debía ser unida, comprensiva y fuerte.

separador

07 Harold Garcia

Harold García
Hombre gay (él)
Edad: 25 años
Origen: Medellín

Harold es un estudiante universitario de bibliotecología y está próximo a graduarse. Usa lentes, tiene el cabello negro y es esbelto. Nació y fue criado en un barrio popular de Medellín. Vive con sus padres y su hermano menor. 

Tenía 17 años la primera vez que sintió una emoción incontrolable por otro hombre, estaba en sus últimos años de colegio y sentía que ya era una carga seguir ocultando quién era.

Desde sus 10 años Harold sabía que era homosexual pero la posibilidad de contarlo y ser aceptado parecía imposible. Y es que salir del clóset en un contexto en el que prima la violencia urbana y la homofobia, como lo es Colombia y más específicamente un barrio popular de Medellín, complejizaba la situación. Al crecer rodeado de hombres heteronormados y hostiles, camuflarse como uno de ellos era la alternativa menos desafiante. 

Aunque quería contárselo a su familia, fue su madre, Denise, quién lo impulsó a hacerlo luego de descubrir por su cuenta que Harold era gay. “Sentía que era momento de manifestarlo, pero  siempre me ha dado duro exteriorizar las cosas, hablarlas. No era capaz. Pero mi mamá me hizo el favorcito, me pilló una vez que dejé el celular sin clave y lo cogió. Y bueno, ella siempre me apoyó. esa misma semana le contó a mi papá y él me dijo que me apoyaba en todo, que mientras yo estuviera feliz y conforme con mis decisiones él también se iba a sentir bien”.

Días después, en una fiesta con sus amigues, decidió ser sincero con quien era en realidad. “Cuando uno está tomando como que afloran las emociones. Yo me sentí muy sensible, les empecé a contar y me volví un mar de lágrimas, desde entonces todo fluyó súper chévere”, recuerda. Los siguientes en enterarse fueron sus demás familiares, resalta que sintió mucha tranquilidad porque su abuela de 85 años lo tomó con mucha naturalidad.

Como ocurrió en el caso de Harold, contar con la comprensión de los miembros de su familia y la aceptación en los círculos de confianza ayuda a hacer mucho más fácil la experiencia. Hoy, casi diez años después Harold es libre, libre de amar y ser completamente auténtico. 

separador

07 Harold GarciaAna María Luna
Mujer bisexual (ella)
Edad: 19 años

Origen: Tolima

Ana María es imponente y audaz, de carácter reflexivo, es estudiante de sociología y periodismo. Nació en Tolima pero vivió su adolescencia en Bogotá, actualmente vive con sus roomies en un apartamento cerca a su universidad en Medellín.

El descubrimiento de su orientación sexual fue un proceso empírico, de a poco. Todo comenzó desde sus primeras interacciones con niñas y niños, la primera vez que se besó con una niña estaba en el jardín, se llamaba Carla y era crespa. Más adelante, en bachillerato, creó una relación muy cercana con una de sus compañeras llamada Valentina, con la cual se besaba. En ese momento Ana aceptó su bisexualidad, ya que aunque le atraían las mujeres, también lo hacían los hombres.

Afortunadamente, el ambiente familiar y social de Ana le ha permitido ser muy abierta con su orientación sexual, “me considero una persona muy afortunada porque estoy rodeada de personas que me aceptan, en el camino siempre se encuentra  gente que no te trata de la mejor forma, que te mira extraño o que te juzga, pero nunca me he sentido rechazada por por mi orientación sexual, ha sido más bien una suerte de hipersexualización, lastimosamente”.

Ana tenía 14 años cuando “salió” del clóset –porque más bien la sacaron–. Recuerda que su madre se encontraba en el aeropuerto y la llamó, para ese entonces Ana tenía novio, le preguntó si le gustaban las mujeres, si había tenido encuentros con alguna y Ana le respondió que sí con mucha franqueza, “me dijo que si estaba segura, que lo íbamos a tratar por psicología pero en realidad siento que fue un comentario que hizo en medio de su sorpresa”.

En su círculo social no tuvo que contarlo, pues era muy obvio, “no fue sorpresa para nadie, nunca ha sido sorpresa para nadie, creo que eso está muy bien, dice mucho de la seguridad que tengo respecto a mi orientación”.

***

Algunos consejos para salir del clóset

Como sabemos que en la mayoría de ocasiones quedan más dudas que certezas, esta es una serie de consejos que nos regalaron estas personas y la psicóloga Pilar Aguirre para salir del clóset:

  • El miedo será su mayor enemigo a enfrentar, siempre lo tendrá y es comprensible, pero una vez tenga la convicción de dejarle a un lado todo será más fácil, recuerde que es su libertad lo que está en juego
  • Tenga una red de apoyo antes de tomar la decisión de salir del clóset, esta red puede estar compuesta por amigues o familiares y será de vital importancia las diferentes reacciones que puedan tener sus demás círculos sociales. No estar solo o sola en este proceso aliviana la vida
  • Analice su entorno familiar y social, si depende económicamente de sus padres o alguien que sea homofóbico es mejor pensar con más detenimiento. Si ese es su caso es probable que en el momento intente ser independiente antes de salir del clóset 
  • Tener un acompañamiento terapéutico podrá marcar una gran diferencia, recuerde que hay profesionales privados y públicos que pueden escuchar todas sus dudas y ayudarle en cada paso del proceso
  • Es primordial tener seguridad sobre esta decisión, sincerarse con usted y aceptarse es el pilar de todo. Tómese el tiempo que necesite y no dude de quien es, recuerde que si no está convencido o convencida será aún más complicado el enfrentar los comentarios de otros y otras

¿Sabe la diferencia entre lesbiana, gay, bisexual, transgenero, transexual, travesti, intersexual y queer? 

La sigla LGBTIQ+ se ha expandido con los años: a finales de 1980 se agrupaban a todas las personas como “comunidad gay”. Añadir más letras ha sido una forma de ampliar el campo de la inclusión y de reconocer las particularidades de los miembros de esta comunidad creciente. 

Lo primero es aclarar los términos identidad sexual y orientación sexual. Según la Asociación de Psicología Americana (APA), la identidad sexual “es la sensación inherente y profundamente sentida de una persona de ser un niño o un hombre; una niña o una mujer, que puede o no corresponder al sexo de una persona asignado al nacer”; mientras que la orientación sexual “trata de la atracción sexual, afectiva y erótica que una persona puede sentir por hombres, mujeres, ambos, ninguno, o personas que son de género queer, andróginos o que tienen otras identidades de género”.

Reconociendo y nombrando estas definiciones es más fácil comprender la pluralidad de la comunidad.

Lesbiana: mujer que se siente atraída por otra mujer (orientación sexual).
Gay: hombre que se siente atraído por otro hombre (orientación sexual).
Bisexual: persona que se siente atraída por mujeres y hombres (orientación sexual).
Transgénero: persona cuya identidad sexual es contraria a su género biológico (identidad sexual).
Transexual: persona transgenero bajo un proceso hormonal o de operación de cambio de sexo (identidad sexual).
Travesti: persona que realiza una representación del género contrario (expresión de identidad sexual).
Intersexual: persona que nació con una combinación de características femeninas y masculinas. Por ejemplo, que puede tener ovarios y pene (no es una identidad ni orientación sexual). 
Queer: persona no binaria, la cual no tiene un patrón para delimitar su orientación sexual ni su género.
+: las orientaciones e identidades sexuales cada vez son más amplias, se han añadido otros términos como pansexual, demisexual y asexual.

La importancia de distinguir y nombrar a cada grupo radica en la posibilidad de identificarse dentro de ellos en una situación compartida con otras personas, unirse para luchar por sus derechos es también apropiarse de su propia identidad.

separador

cierre

Mariana Martínez Ochoa

Periodista. Escribe artículos y crónicas sobre arte, diseño, cultura y salud mental. Entusiasta de la cultura popular, la tecnología y la ciencia. Le gustan las “matas”, las fuentes claras y el chocolate espeso.

Periodista. Escribe artículos y crónicas sobre arte, diseño, cultura y salud mental. Entusiasta de la cultura popular, la tecnología y la ciencia. Le gustan las “matas”, las fuentes claras y el chocolate espeso.

Cultura Pop
Le puede interesar

¿Se ha preguntado de dónde vino el objeto que le está permitiendo soportar los bochornos actuales? La autora nos cuenta en este refrescante texto.
Andrea Yepes Cuartas
Andrea Yepes Cuartas
-Noviembre/21/2024
Junto a varias invitadas especiales y más de 5.000 asistentes, el festival culminó cinco días de arte urbano lleno de mujeres referentes de las artes. Aquí un recap.
Cristina Dorado Suaza
Cristina Dorado Suaza
-Noviembre/20/2024
Con los años cumplir años no es lo mismo: estas celebraciones tan antiguas como la humanidad se pueden llenar de sensaciones complejas. Aquí una mirada.
Laura Daniela Soto Patiño
Laura Daniela Soto Patiño
-Noviembre/19/2024
¿Quién no ha quedado cautivo de esas imágenes que parecen salidas de una hermosa pesadilla? Aquí una carta de amor de un fan de esas películas.
Juan Sebastián Lozano
-Noviembre/18/2024
Si algo nos dejó claro este año es que cualquier banda es susceptible de resucitar. Aquí un homenaje a esas bandas se animaron a volver veinte años después.
Raúl Orozco (Raeioul)
-Noviembre/15/2024
Desde el Egipto faraónico hasta las cocinas de América, la levadura, la harina y el agua han hecho maravillas con la historia. El autor nos cuenta.
Juan Sebastián Sánchez H.
-Noviembre/13/2024
Tiny Lulo, Juanchaco y Caroca explorarán en tres activaciones en vivo todo lo que es capaz de hacer la Samsung Galaxy Tab S10. Te contamos los detalles.
Bacanika
Bacánika
-Noviembre/13/2024
¿Cuántas horas invertimos en crear piscinas, romances y cementerios? La autora nos recuerda esos días gastados en imaginar la vida adulta.
Mariana Martínez Ochoa
Mariana Martínez Ochoa
-Noviembre/12/2024