Los deportes urbanos que llegaron a los podios olímpicos
Este año el skate, el BMX freestyle y muy pronto el Breaking le han traído aires nuevos a las competencias olímpicas. ¿De dónde vienen, cómo llegaron, cómo se compite en estas disciplinas? Desde París, la autora nos cuenta en estos breves perfiles del deporte callejero que se subieron a algunos de los podios más prestigiosos del deporte internacional.
El skateboarding, el BMX Freestyle y el Breaking son una de las grandes apuestas de París 2024 para promocionar los deportes urbanos y la paridad de género. Los tres tienen sus orígenes en Estados Unidos, y se caracterizan por ser muy populares entre las nuevas generaciones y tener una fuerte conexión con los amantes del rap y hip hop de todo el mundo.
En la diversidad se encuentra riqueza, pero hacerlo es necesario reconocer qué tienen en común las generaciones de distintas nacionalidades en todo el mundo. Estos tres deportes urbanos son un ejemplo de lo representativo que es pertenecer a una comunidad claramente definida desde la ropa que usan sus atletas, la música que escucha su público, hasta las historias de vida detrás de quienes lo practican en las calles del mundo.
Este es el caso de Tony Hawk, la leyenda del skate, quien participó en Tokio 2020 con 53 años afirmando cumplir un sueño: "Cuando era un niño, fui muy criticado por mi interés en el skate, así que nunca imaginé que sería parte de los Juegos Olímpicos. Es surreal estar ahora en Tokio siendo testigo de este hito en estas circunstancias sin precedentes”, escribió Hawk en sus redes sociales.
Uno de los grandes aciertos de estos deportes es que, a nivel olímpico, el formato de competición es idéntico al usado en campeonatos mundiales con más tradición en las calles y reconocimiento de la comunidad deportiva. De esta forma, Olímpicos no interfiere en el circuito, sino que llega a dar un estatus a los atletas que vienen haciéndose un nombre en sus países y regiones. Es el caso de Rayssa Leal de Brasil, quien, con solo 16 años, es doble medallista olímpica, símbolo del Brasil moderno y también del nuevo ciclo olímpico que tiene a mujeres como Simone Biles y Mariana Pajón como leyendas activas olímpicas.
El skateaboarding apareció en los años 50 de manera espontánea en los Estados Unidos de la mano del surf. Entre los 60 y 70 este deporte creció en California por una sequía que dejó las piscinas vacías. En los 80 aparecieron los trucos, de la mano de leyendas como Steve Caballero, Tony Hawk y Rodney Mullen, todos estadounidenses. Así se fue creando el repertorio que procedía de las calles y barrios populares de grandes ciudades estadounidenses que formó la base del skateboarding moderno a nivel mundial.
El skateboarding tuvo su debut olímpico en Tokio 2020. Los locales ganaron tres de las cuatro medallas de oro de los Juegos de la pandemia. Además de los japoneses, las delegaciones de Brasil, Australia y Estados Unidos tuvieron buenas presentaciones.En 2021, Kokona Hiraki de Japón fue la deportista más joven en competir (12 años). Un récord de 85 años de historia olímpica. En París, Zheng Haohao, también skater de origen chino, lo superó siendo la atleta más joven en competir en los Juegos de 2024 con sólo 11 años de edad. En París logró el 4o lugar, con el cual obtuvo diploma olímpico.
En París hubo modalidad Street y Park para mujeres y hombres. En total, se entregarán 12 medallas en este deporte y compiten 44 patinadoras y 44 patinadores. La pista tenía un excesivo calor como un desafío adicional para las jóvenes atletas que debutaron en Tokio sin público. Colombia tenía cupo en esta modalidad con Jazmín Álvarez, pero una lesión de ligamentos cruzados, ya estando en París, la dejó por fuera de la competencia. La española Daniela Terol tomó su lugar por ser la siguiente en la lista de clasificación. La antioqueña de 24 años sigue siendo la primera colombiana en clasificar a Juegos Olímpicos en skateboarding modalidad Street.
En esta modalidad se busca replicar el estilo urbano de terrenos más tradicionales y arraigados a los orígenes de este deporte. Por eso es común ver trucos como el ‘Stair sets’, ‘Rails’, Gaps, Benches o Ledges, donde el nivel de complejidad depende de los giros que la o el atleta pueda dar en la patineta; si el skater inicia de espaldas o de frente a la barandilla, la velocidad y la estética en la caída. Entre más limpia sea la salida en ruedas, mejor puntuación para los jueces, pero también se juzga el estilo, la creatividad, la elevación que consigue el skater, y lo arriesgado del truco.
Mientras que la modalidad Park se basa en definir los mejores desempeños en terrenos con obstáculos como cuencos de hormigón de transición de 1,5 m a 3 m de profundidad, espinas, caderas en ángulo, extensiones, escaleras mecánicas, paredes retranqueadas, cambios de elevación, huecos y superficies con variables.
En París, la modalidad Street compitió el 28 y 29 de julio y Park compite el 6 y 7 de agosto. En ambas categorías y modalidades se destacan las delegaciones de Japón, Estados Unidos, Gran Bretaña, Brasil y Australia.
La popularidad del BMX explotó a partir de la película E.T estrenada en 1982. La memorable escena del extraterrestre escapando del gobierno estadounidense usando una bicicleta de BMX generó un antes y un después en esa generación inspirada en las bicicletas como una herramienta de libertad y empoderamiento. Esto generó un interés sin precedentes en la juventud de la época que disparó la venta de bicicletas en todo el mundo.
La modalidad freestyle o ‘estilo libre’ emergió en la década de 1980 cuando los bicicrocistas empezaron a hacer trucos con sus bicicletas en los eventos de carreras. Varios eventos como los X-Games, Gravity Games y Dew Tour, le dieron un impulso importante a este deporte. Con ruedas de apenas 50 cm de diámetro, estos atletas realmente pueden volar con estas pequeñas bicicletas, increíblemente ligeras (pesan menos de 12 kilos) y fáciles de controlar y dirigir en todas las direcciones. Así pueden realizar trucos como el famoso sin manos para liberarlas en el aire, entre muchos otros.
El ciclismo BMX Freestyle ingresó al ciclo olímpico en junio de 2017. En París 2024, la competición tendrá una fase clasificatoria y una final. En las finales femenina y masculina habrá 12 mujeres y 12 hombres disputando el podio olímpico, y cada uno tendrá dos rondas para impresionar a los jueces. En cada ronda, los corredores deben completar 60 segundos en pista. Cada truco cuenta hasta que suena el pitazo. Es común ver caídas, pero es posible ver a los atletas levantarse y seguir compitiendo.
El BMX Freestyle compitió entre el 30 y el 31 de julio. En este deporte se destacan las delegaciones de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, China, Japón y Australia. La colombiana ‘Queen Saray’ obtuvo diploma olímpico y estuvo a 0.8 puntos de ser bronce. Mientras que el argentino José ‘Maligno’ Torres Gil obtuvo el oro, tercera medalla dorada individual en la historia del ciclo olímpico de su país.
Conocido popularmente como breakdance, es un estilo de baile que nació en las fiestas de hip hop en el Bronx en Nueva York en 1970. Se caracteriza por movimientos acrobáticos con juegos de pies llevados al ritmo del DJ y el MC (maestro de ceremonias) en batallas de uno contra uno. Generalmente se usan beats, funk, rap, hip hop y soul. Es el único deporte nuevo de París 2024.
El Breaking fue aceptado como deporte olímpico en 2020 después de su impresionante debut en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, pero sólo estará en París 2024 porque la comisión de Los Ángeles 2028 descartó su convocatoria para los próximos Juegos Olímpicos. El estreno del breaking en París será el 9 y 10 de agosto.
Por ser país anfitrión de los Juegos, Francia tendrá dos cupos (uno por género). Los atletas restantes fueron seleccionados a través de los Mundiales de 2023, los respectivos Juegos continentales y las Series de Clasificación Olímpica (OQS, por sus siglas en inglés) celebradas en Shanghái y Budapest este año. B-Girl Luma es la gran referencia colombiana a nivel internacional, pero no obtuvo la clasificación final a París 2024.
Los atletas del Breaking son conocidos como B- Boys y B-Girls o “breakers”. Las batallas son el formato de competición donde dos atletas se enfrentan. El primero realiza su performance, y el segundo le responde para finalizar el round y obtener un ganador declarado por los jueces. Primero habrá una fase individual con grupos formados de ‘todos contra todos’ llamado ‘round robin’. Avanzan a la siguiente fase los dos mejores atletas.
En París 2024 habrá una competencia para B-Girls (17 atletas) y una para B-Boys (16 atletas). Cada batalla cuenta con dos rounds, donde los breakers son asignados al lado azul o rojo. Los que queden en el lado azul pueden decidir si inician la batalla o responden al performance del atleta del lado rojo. Los puntajes se dan a conocer al final de cada turno. Al final de cada round robin, las dos mejores B-Girls y los dos mejores B-Boys avanzan a cuartos de final.
En la terminología del deporte se destacan los freezes o ‘congelados’ como poses donde los breakers se detienen por completo para exhibir movimientos complejos, y los power moves, una serie de movimientos complejos donde la gravedad y la velocidad juegan un papel importante. También se destacan los ‘bites’, series de movimientos y combinaciones tomados de otro breaker; los ‘blow ups’, movimientos rápidos y explosivos que pretenden sorprender al oponente o la rival; y los ‘air moves’, saltos y movimientos en el aire donde el cuerpo no toca el piso y queda suspendido, entre otros.
Aunque hay críticas alrededor de aceptar el breaking como deporte olímpico, especialmente por parte de atletas y federaciones más tradicionales que no son consideradas olímpicas como el karate o el patinaje de carreras. Sin embargo, los deportes urbanos generan una alta representación social en clases históricamente marginadas y para el Comité Olímpico Internacional, la inclusión es innegociable: entre más personas puedan practicar deportes y vivir una experiencia olímpica, más sentido y futuro tienen los Juegos Olímpicos. En ese sentido, estos deportes no sólo ayudan a renovar la imagen de los atletas que participan en los Juegos, sino que generan expectativa y atraen un público distinto, históricamente desligado del ciclo olímpico tradicional.
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