6 diseños esenciales de Rodrigo Torres
Revisamos el portafolio del diseñador industrial Rodrigo Torres y seleccionamos seis objetos icónicos de su trayectoria para contarle la historia de un colombiano que ha sabido batirse en las grandes ligas internacionales.
Mientras cursaba segundo semestre, en un pasillo de la universidad, ojeó un libro de Philippe Starck y quedó fascinado cuando vio el exprimidor de naranjas Juicy Salif que el francés diseñó para Alessi. Empezó a soñar con la idea de crear algún objeto para la firma italiana y, meses después, un documental sobre la vida del científico Rodolfo Llinás le transmitió la confianza en que un colombiano puede destacarse entre los mejores del mundo en su campo.
Antes de graduarse, trabajó en Italia en el área de diseño de lavado y secado de Whirlpool y, una vez obtuvo el título en Bogotá, viajó a Milán a hacer la maestría de Diseño de producto de la Domus Academy. Fue monitor en seminarios y llegó a ser líder de proyectos en las maestrías de Diseño interactivo y de producto. Durante cinco años, paralelo a la docencia, trabajó en el estudio de Stefano Giovannoni. Empezó como diseñador junior y llegó a convertirse en una de las manos derechas del arquitecto. En 2005, se independizó y llegó al Salón del Mueble de Milán con un par de poltronas que produjo Domodinamica: Duna y Mist; ahí comenzó un nuevo emprendimiento que no ha parado de moverse. En su portafolio se encuentran más de 24 proyectos; junto a él escogimos seis piezas claes para entender su trayectoria.
KOKA
Juguete artesanal / 2006
Producción: diseñado originalmente en 2006, producido por Artesanías de Colombia/ Diseñadora Ángela Ramos, en 2016
Materiales: madera torneada. Puede ser recubierta con hilos de algodón, cuero o plástico.
En 2006, para la celebración de los 11 años de Proyectodiseño, la revista invitó a un grupo de diseñadores colombianos a proponer proyectos que se pudieran replicar en todos los municipios del país bajo una licencia en la que los autores cedían los derechos.
Rodrigo estaba en Milán cuando recibió la noticia y lejos del país tenía una nostalgia por los buenos recuerdos. “Es difícil describir el proceso creativo de cualquier diseño, sobre todo cuando trabajas con la parte comunicativa, formal, la metáfora, la semiótica, etc. Pero acá me entró un sentimiento de crear un objeto que representara la relación con los artesanos, que es una de las partes más lindas y virtuosas del país. Y pensé en esa fuerza creativa, esa riqueza técnica que contrarresta la imagen terrible del narcotráfico y de la violencia que marcan al país”, explica. Entre las pensamientos que llegaron a su cabeza había recuerdos de esos objetos artesanales que lo hacían feliz cuando era un niño. La imagen de la coca apareció en su mente y le pareció acertado “celebrar esa parte jocosa, divertida y lúdica de este objeto típico de nuestra artesanía y decidí trabajar sobre este icono”.
Para el nombre, jugó con el antagonismo de una misma palabra que por un lado manifiesta la lúdica de campesinos e indígenas y por otro la pesadilla que ha sido la cocaína en el país. La mayor dificultad que enfrentó fue obtener una pieza formalmente atemporal y perdurable a través de la simplicidad de sus formas: “lograr una elegancia que permitiera aplicar una técnica excelsa de tejido”. Esta pieza fue producida en 2016 mediante una alianza con Artesanías de Colombia, cuando la diseñadora monteriana Ángela Ramos entretejió a mano con hilos encerados el cuerpo en madera de Koka.
CHIP
Portaclips y pisapapeles / 2009
Producción: Alessi
Materiales: zamak cromado con imanes internos que sujetan los clips
En noviembre de 2007, nació Nicolás, el hijo mayor de Rodrigo. Mientras su esposa trabajaba, él se quedaba con el bebé en el apartamento en el que vivía la familia en Milán. Una tarde de 2008, después de dormir al pequeño, se sentó en su escritorio a hacer bocetos. “En la experiencia de papá primerizo uno empieza a pensar en el futuro y a lanzarse a cumplir sueños para empezar a producir y darle de comer al niño”, recuerda. Entonces retomó el sueño de diseñar para Alessi y en esas se encontró con un clip. Lo tomó con la mano e instantáneamente le llegó a la mente la imagen de una pluma. Empezó a pensar en crear algo para la oficina partiendo de este elemento y explotó la imagen de la pluma como pate de un todo, de un pájaro. “No hay una receta para el proceso creativo porque no tiene reglas. Es un acto de magia que sucede en un segundo”. Y desde allí desarrolló la metáfora de las alas de un pájaro. Un ritual interactivo que simboliza la libertad en el ave, una escultura útil y desestresante para el usuario que se sienta frente a su puesto de trabajo.
HARMONY
Silla / 2012
Producción: Poliform
Materiales: Estructura metálica y superficie en madera
Esta silla es la pieza número seis de los objetos que Rodrigo ha creado para la firma italiana Poliform. Representa la armonía y la coexistencia entre dos opuestos que en este caso son el orden y el caos. La idea partió de la estructura, cuando el diseñador quiso retomar un perchero que denominó Twister y que no pudo seguir produciendo la firma Busso debido a la crisis económica del 2008, año en el que varias compañías italianas quebraron. Cuando uno de los dueños de Poliform vio el perchero quedó encantado, le propuso a Rodrigo una nueva tecnología para crear la silla y el diseñador celebró, con una mano en el corazón, su admiración por la pareja Eames contrastando la base con una superficie orgánica de madera.
“Cuando uno ha crecido como diseñador teniendo como héroes proyectuales a personas como los Eames, apenas enfrentas el mundo de la silla, siempre vas a tener como referente las obras maestras de ellos. Es un homenaje sin irrespetarlos, en el sentido de copiarlos, porque mi respeto y amor por el trabajo de ellos es infinito”, enfatiza. Cuando el dueño de Poliform le ofreció una nueva tecnología para desarrollar la base que había creado, a Rodrigo le vino a la cabeza elaborar una superficie rotada.
SUSHI
Encendedor / 2013
Producción: Alessi y Lightech
Materiales: componentes internos desde polímeros hasta metales. Exterior en plástico, resina resistente al calor, metal y botón en ABS cromado
“Tengo como filosofía no diseñar cosas que atenten contra el ser humano ni contra el ambiente. El encendedor normal para mí tenía la connotación del cigarrillo”, afirma Rodrigo, quien fue comisionado para este proyecto tras un concurso interno de Alessi. Para diseñar este artefacto se propuso hacer un encendedor enfocado en el uso doméstico. Por esta razón tiene esa pequeña chimenea que facilita el acceso a candelabros profundos o a la estufa de la casa.
Su inspiración para esta pieza fueron los electrodomésticos de los años cincuenta. Como ícono emotivo, simpático y acogedor, acudió al contraste entre el cromo y el plástico en colores típicos de esa época como blanco, negro, naranja y azul pastel: “para celebrar y recrear esa alma doméstica del fuego portátil de la casa”, explica el diseñador.
El nombre, Sushi, nació en la conceptualización. Mientras trabajaba con la marca japonesa, pensó en algo que tuviera la potencia del fuego, “y me acordé de la primera quemada que me metí con wasabi mientras comía sushi. Me pareció divertido el nombre. Además, la forma de los primeros bocetos, parecía un rollito de sushi cubierto con algas. Fue el nombre que puse al crear el archivo del proyecto y así se quedó”.
SENSE
Grifería / 2015
Producción: Alessi y Oras
Materiales: Polímeros de última generación, latón, policarbonato y componentes electrónicos.
Premios: Red Dot 2016, Lápiz de Acero 2016, Finalista Bienal Iberoamericana de Diseño 2016, Good Design Award 2017
La idea empezó como un concurso interno en Alessi. Participaron cuatro diseñadores y Rodrigo ganó. Él ya había creado un baño para la firma italiana cuando estuvo en el estudio de Stefano Giovannoni. Trabajó dos años en el diseño y desarrollo de varias piezas de grifería y mobiliario, hasta que este proyecto fue estrenado en Milán en 2002.
Al enfrentar este reto se cuestionó: “¿Cuál es el sentido de una grifería nueva?”. Partió de la idea de cambiar el comportamiento de las personas frente al consumo de agua. Este diseño contribuye a un uso razonable con la conciencia de ahorrar el recurso. Y no se trata de un sensor –tan usual en los baños públicos–. Hay un contacto con el grifo que asegura el agua durante seis segundos o tiempos programables para cada usuario.
“Los premios son bonitos, porque siempre es reconfortante que alguien reconozca tu trabajo. Pero el hecho que personas saquen dinero de su bolsillo para comprar algo que tú diseñaste, que le aporta al medio ambiente y que educa en el ritual diario de consumo de agua, eso es para mí el premio más grande que pude haber recibido”, explica. Sense continúa vendiéndose en Europa y ese hecho resulta gratificante y excepcional para diseños en esta línea, pues muchos proyectos que podrían tener un impacto positivo en el medioambiente dejan de producirse porque la gente no los compra.
SIGNATURE
Electrodomésticos / 2016
Producción: Challenger
Materiales: Madera, metal, plástico y vidrio templado
Premios: Tres Good Design Award 2017 para estufa, horno y campana extractora
“El primer reto de mi vida –y me lo propuse desde la universidad– fue ir a Italia a trabajar para Alessi. A demostrarme a mí mismo y a la gente de allá que los colombianos no éramos solo narcotráfico, violencia y una república bananera. Que podíamos ser personas competitivas, honestas y excelentes en nuestro trabajo. Con esa garra, al estilo futbolero, me fui para allá y lo logré. Pero despuésde haberlo conquistado, me puse un nuevo reto: volver a Colombia para aportar desde aquí a los colegas y empresas locales. Demostrar que podemos crear y hacer objetos hermosos, válidos y potentes dignos de ser reconocidos internacionalmente por su calidad”.
Fue así como en 2014 Rodrigo regresó a Bogotá con su familia. Llegó a mediados de año y en diciembre fue invitado por el gerente de Challenger a ser jurado de un concurso interno de la empresa. Ese día, Rodrigo llevaba la grifería Sense en el baúl de su carro. La sacó y se la mostró a Leonardo Mayorga, gerente del área de electrodomésticos de Challenger, y quedó encantado. Meses después, llamó a Rodrigo y le comisionó la tarea de crear una nueva colección de electrodomésticos para conmemorar los 50 años de la firma colombiana. De este proyecto nació Signature, la línea conformada por nevera, horno, estufa y campana extractora.
“Lo importante para mí era celebrar la naturaleza industrial que ha hecho a Challenger reconocido en Colombia. Esa naturaleza tiene en su ADN dos mundos productivos: por un lado el del electrodoméstico, donde están los metales, los plásticos, los vidrios… y en el otro lado, el mueble y el trabajo en madera. Me pareció clave, para rendir un homenaje a la marca, fundir estos dos mundos”, explica. Con la madera, que es uno de los materiales más vivos, desarrolló la metáfora de pasar la hoja en las manijas de la nevera y del horno.
En Signature, la hoja cumple una función estética, comunicativa, de imagen y también una función estructural y ergonómica. En la estufa se genera en la superficie de inclinación para acceder a los botones –donde las manos se protegen del fuego– y en la campana, la madera arropa el volumen convirtiéndola en una cálida lámpara que en cualquier momento puede prenderse para extraer olores. Su excelencia en el diseño mereció los premios. La elegancia de cada una de las piezas de Signature presenta una sencillez contundente que por sí sola arrasó con sus galardones del Good Design.
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En septiembre, Rodrigo dirigirá en Bogotá un taller práctico intensivo especializado en diseño de producto. Está enfocado a estudiantes, recién graduados o profesionales que quieran conocer mediante ejemplos tangibles la forma de aplicar los conocimientos de producción, semiótica, forma, tecnología y mercadeo.Suscríbase a nuestro boletín
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